Muchas veces pasamos por alto las cosas más importantes de nuestra vida. Decir "te quiero" a familiares, cuidar las amistades, la compañia de nuestras mascotas... son cosas que con el día a día despreocupamos porque las tenemos ahí, y sabes que ahí seguirán.
Pero un buen día puede que todo tu mundo, toda tu "rutina" cambie por completo y hasta entonces no te darás cuenta de lo mucho que llegan a importar las pequeñas cosas.
Disfrutar de un buen libro, una película con palomitas, escribir un diario, o escuchar tu canción preferida y cantarla a pleno pulmón ...
Cambiar de trabajo, cambiar de ciudad o incluso de país no es incompatible con cuidar de esas pequeñas cosas, porque son lo más importante, son lo que sin darnos cuenta nos ayudan en nuestra vida para seguir adelante y no volvernos majaras.
Hoy va por todas esas pequeñas cosas, risas, unas cervecitas en una terraza, una tarde de cine, dar largos paseos y perderte por la ciudad ... siempre hay que conservar esas pequeñas cosas y sobretodo a las personas que las hacen posibles.

No hay comentarios:
Publicar un comentario